DOM Barberias

Beatriz Anquela

Llevé a mi hijo a cortar el pelo y le dije cómo lo quería , no sé para qué porque le hicieron lo que quisieron, un degradado horrible sin solución, de vergüenza cuando le digo que por qué le había metido el 0 si yo le había dicho que el 2 , para colmo mi hijo cuando nos fuimos me ha llegado a decir que se reía de mí intentando hacerle cómplice porque no me gustaba el corte. Una auténtica vergüenza el trato, el servicio y la chulería de este ser que me ha atendido. No entiendo por qué siempre hay gente, yo no vuelvo en mi vida

Rosa Alcobendas

Mi marido ha acudido esta mañana a cortarse el pelo, ha venido encantado Trato excepcional y servicio impecable Sin duda volverá

Lorenzo Fyahbwoy

La primera vez k fui me cobraron 12 euros incluso,me cortaron lo de arriba a máquina,degradado y cejas y la segunda vez un degradado y ya está sin tocar la parte de arriba y 14 euros 👎🏻

Talaverano98

Cuando he llegado al local había dos peluqueros, un chico joven y un hombre alto y moreno que debía ser latino. Este último me ha dicho que él no cortaba a tijera, que solo con máquina. Yo le he dicho que quería un corte a tijera (tal y como queda expresado en los servicios que ofrecen) y me ha vuelto a repetir que él solo con máquina. Ante esta situación, el chico joven me ha preguntado que si quería el corte entero a tijera, le he dicho que sí, y cuando ha acabado con su cliente me ha dado paso. Al chico joven le pondría 5 estrellas por su atención y profesionalidad, pero no me ha parecido bien que el otro peluquero se negase a cortarme a tijera. Entiendo que haya peluqueros que trabajen más cómodos con máquina o tijera, pero todos deberían poder ofrecer los servicios que se anuncian en la peluquería y no pasarle el cliente al compañero porque ellos no saben o no quieran (ignoro el motivo real). Y otra cosa hubiese sido que me hubiera dicho algo como "mira perdona, si no te importa ¿podrías esperar a que termine el compañero?, él tiene más técnica con la tijera" o algo similar. Pero se ha limitado a hablarme mientras terminaba de cortar el pelo a otro cliente, girando la cabeza y diciendo "yo corto a máquina".